Reseña || Ángeles Caídos (El Fin de los Tiempos #1) de Susan Ee

Título original: Angelfall

Serie: Sí (Penryn & the End of Days #1)

Autor: Susan Ee

Español: Sí (en México por OCEANOexprés)

Sinopsis:

Han pasado seis semanas desde que los ángeles del Apocalipsis descendieron para demoler el mundo moderno. Las pandillas callejeras gobiernan los días mientras el miedo y la superstición controlan la noche.

Unos ángeles guerreros se llevan consigo a una indefensa niña pequeña, pero Penryn, su hermana de diecisiete años, hará lo que sea para recuperarla. Cualquier cosa, incluso llegar a un pacto con un ángel enemigo. 

Raffe es un ángel que se encuentra a punto de sucumbir a manos de otros ángeles rivales y sin alas con las que defenderse. Después de librar sus propias batallas durante eones, se encuentra a sí mismo siendo rescatado de una situación desesperada por una adolescente medio hambrienta.

Viajando a través del ahora oscuro y retorcido Estado de California del Norte, solo se tendrán el uno al otro para sobrevivir. Juntos, viajarán al bastión de Los Ángeles en San Francisco, donde ella lo arriesgará todo para rescatar a su hermana y él se pondrá a merced de sus más grandes enemigos para recuperar su grandeza perdida.

«¿Y si los ángeles no fueran tan buenos como creíamos?» 

Entertainment Weekly

Esta reseña va a ser una combinación extraña que espero resulte para bien, entre la reseña que hice del libro en 2013 y la reseña que haré ahora que lo he releído. Así que comencemos por lo más obvio... amé este libro en 2013 y Raffe (el ángel principal en esta historia) se convirtió en uno de mis personajes masculinos literarios favoritos. Ahora que leí este libro por segunda vez en el 2020, volví a amar la historia y me emocioné como adolescente con cada parte que recordaba había disfrutado de Raffe.

Así que mucho en mí no ha cambiado más que probablemente el no tomarme tan en serio la posibilidad de encontrarme con un ángel del Apocalipsis con sentido del humor cursi (así como Penryn lo describe).

La Trama:

La sinopsis nos dice bastante sobre el inicio del libro y el rumbo que van a tener los personajes en él.

Básicamente el Apocalipsis comenzó cuando el arcángel Gabriel llegó en su gloria con más arcángeles y ángeles guerreros a dar un mensaje, porque a.k.a "El Mensajero de Dios" y entonces los humanos lo balearon hasta que murió o algo por el estilo. Desde ese momento el resto de los ángeles han traído con ellos desastres naturales que han acabado con gran parte de la humanidad.

Han pasado 6 semanas desde el inició del Apocalipsis que es donde Penryn nos empieza a narrar, en ese tiempo ella, su hermana pequeña (Paige) y su mamá han estado sobreviviendo. Ellas planean llegar a un nuevo lugar en donde puedan encontrar comida y protección.

Y es en esa salida donde se topan con una pelea de ángeles, 5 contra 1... y sí ajaaaaa ese 1 es Raffe. 

Penryn es testigo de como los 5 ángeles le cortan las alas al otro ángel y lo dejan medio moribundo en la calle... todo iba "bien" hasta que uno de los ángeles ve a la hermana de Penryn y se la lleva... Entonces en la mente de Penryn todo se vuelve muy claro: tiene que salvar al ángel moribundo sin alas para que le información sobre a dónde se llevaron a su hermana.

Ven que todo tiene mucha lógica...

AJA AJA AJA YEP YEP

A partir de esta parte Raffe y Penryn vas a "asociarse" para llegar "al Nido" que está en San Francisco y donde todos los ángeles se han reunido. Raffe va en busca de los suyos para que le ayuden a salvar sus alas y Penryn va en busca de su hermana secuestrada.

Mi opinión:

Para comenzar el tema de Apocalipsis es algo que siempre puede llamar la atención de alguien y yo voy incluida ahí. La idea de Susan Ee con este libro, meternos en un Apocalipsis con todo y ángeles siendo los emisarios de que el Fin del Mundo está aquí, si bien no es la idea más original tiene "su idea" en donde los ángeles son seres más malos que buenos y están todos desorganizados.

Este es un muy buen libro introductorio.

Nos presenta a sus personajes principales y nos revela poca información sobre lo que se esconde en el desenlace de la trilogía.

El libro es muy ligero de leer... 

En el 2013 recuerdo haber sido muy feliz con capítulos de 4 páginas, pero tengo que aceptar que en mi relectura esta forma de escribir me estresó un poco. No es como que la autora termine cada capítulo con frases "fuertes e intrigantes" para que sigas con el siguiente capítulo. Es más bien que divide sus capítulos en tan pocas páginas que cuando terminas con uno tienes que seguir con el siguiente o si no estarías cortando una escena por su 25% de avance.

La forma en la que las cosas van avanzando pasa de forma muy fluida con excepción de la forma un tanto forzada en la que Penryn decide salvar a Raffe. Pero eso se lo perdono porque es Raffe a quien salvó.

El avance del libro tiene un ritmo acelerado que deja poco para encontrar capítulos de relleno, nos van llenando con eventos extraños que no tienen una explicación ni para los humanos o para los ángeles y eso es algo que te mantiene al borde todo el tiempo.

El final es uno de los finales que más angustiada me ha dejado con un libro que sé que tendrá continuación y eso es algo que me pasó las dos veces que lo leí.

(mismo gif que usé en 2013 para describir lo mucho que esperaba el segundo libro, después de ese final)

Este libro se resalta para mí por sus personajes principales, ambos son personajes con ideales muy claros que no van muy de acuerdo con los ideales de sus especies correspondientes. Además, el romance es muy ligero. No es como que no lo haya. Quiero decir, es obvio que hay romance por el tipo de libro que es, por la escenas que se dan de cierta forma para dar pie al romance, pero aún con todo eso las escenas terminan más en frustración que en algo romántico.

Los personajes:

Ya que esto es algo que me gustó mucho de la historia creo que le debo dedicar algunos renglones a ellos. Sobre todo a los personajes principales.

Penryn, tiene 17 años, sabe montón de artes marciales y defensa personal, tiene una hermana menor en silla de ruedas y madre psicológicamente inestable. Cuando leí el libro por primera vez Penryn era un personaje con el que me sentía identificada en varios aspectos, uno de ellos era su determinación para lograr sus metas a pesar de todos los problemas a su alrededor y que muchos no crean o confíen en ella.

El hecho de que Penryn tenga muy claras sus metas es algo que le da dirección no solo a su personaje sino también a la historia completa.

Raffe, por otro lado es el sueño de toda chica adolescente y aún mayores. Parece chico malo, pero créanme cuando les digo que el trasfondo de su historia es algo que va acorde con su imagen de chico malo y no cae en cliché.

Cuando a mi me vienen a hablar de ángeles en libros juveniles mi estándar de oro es Akiva de Hija de Humo y Hueso porque ese ángel!!! ese ángel!!! es otro nivel!!! Tengo que decir que algo le falta a Raffe para llegarle al nivel de Akiva, pero se lo atribuyo a las diferencias entre las historias y la forma de escribir de ambas autoras... no está de más decir que Laini Taylor = diosa de la escritura fantástica.

Volviendo a Raffe, una de las características que más me gustaron de él fue que es muy claro, habla la verdad, no se anda con tapujos y siempre sabe que decir. Podríamos decir que eso lo hizo un personaje inteligente que no deja influenciar y nuevamente eso le da mucha dirección a la historia.

Algunas frases :)

(que mi persona de 19 años encontró fascinantes para que una Ana de 26 años las vuelva a transcribir)

(Penryn) —... déjame ver tu pie.

(Raffe) —Eso es una demanda muy íntima en el mundo de los ángeles. Por lo general toma la cena, un poco de vino y una conversación chispeante para que renuncie a mis pies.

—Mis amigos me llaman Ira —dice Raffe—. Mis enemigos me llaman Por Favor Ten Piedad...

(Penryn) —¿Por qué los otros ángeles te atacaron?

(Raffe) —Es de mala educación preguntar a la víctima de la violencia lo que hizo para ser atacada.

(Penryn) —No estoy molesta —susurro.

(Raffe) —Por supuesto que no lo estás. Una chica como tú, pasando el rato con un guerrero semi-dios como yo.

Casi tropiezo con una rama caída. —Tienes que estar bromeando. 

—Nunca bromeo sobre mi estatus de guerrero semi-dios.

Finalmente:

La escena final de Raffe y Penryn fue una escena que se quedó conmigo por mucho años y volverla a leer solo confirmó lo buena que esa escena final es y como el final cobra una seriedad y dramatismo que no ves antes en el libro.