TTT #17 || Rasgos/Personalidad de personajes que me encantan

Sip, ya sé que es topten tuesday pero como que anduve ocupada (ya saben) y pues aquí va un topten thursday :D

Cuando vi de lo que trataba el top ten tuesday de esta semana dije: ah esto va a estar fácil... yo amo a los personajes con rasgos especiales y pues me puse a pensar más y no di con ninguno jajaja

Así que después de una minuciosa búsqueda en mis recuerdos más profundos... les presento los 10 rasgos que más me gustan en los personajes!!! (y no solo son físicos también en los tipos de personalidad)

Cabello blanco, este rasgo es un de mis favoritos no solo en personajes literarios, también en anime. Cuando leí The Infernal Devices y di con Jem!!! mi vida tuvo sentido por primera vez jaja (Jem es perfecto deberían leer TID y TMI). El cabello blanco es algo que para mí hace al personaje un ser fantástico y completamente diferente.

Ojos rasgados, para ahora se habrán dado cuenta ya de mi gusto por los hombres coreanos, algo que me gusta mucho en los personajes son los ojos. No tiene que ser necesariamente un tipo de ojo, forma o color hay ojos rasgados que son bonitos porque hacen bonita a la persona, hay ojos verdes que son bonitos por lo mismo así como ojos negros, grandes y pequeños. Pero este rasgo siempre me ha gustado. Jem también lo tiene, pero por mencionar a otro diré Park de Elenor & Park.

Lo que me lleva a los dos siguientes rasgos.

Pecas y cabello rojo. Estos dos rasgos tienen que ir de la mano. En los personajes literarios es muy común ver este tipo de personajes, sobre todo en mujeres. Siento que estos rasgos les dan una apariencia tierna y débil y me gusta cuando lo contrastan con una personaje fuerte e inteligente emocionalmente como lo es Eleanor o Clary de TMI.

¿Qué tengan alas cuenta como rasgo? porque si la respuesta es sí entonces este es mi rasgo físico favorito por sobre todos. Algo tengo con las historias de ángeles (definitivamente mis favoritas cuando hablamos sobre novelas juveniles). Y de ellos puedo dar varios ejemplos Patch/Jev Cipriano de Hush Hush de Becca Fitzpatrick, Lucian de Lucian de Isabel Abedi, Raffe de Penryn & the End of Days de Susan Ee. 

Pasando con los tipos de personalidades que hacen que ame a un personaje, tenemos:

Gracioso/sarcástico, creo que esto es algo indispensable para que un personaje me atrape (ya sea hombre o mujer) aunque este rasgo se ve más en los hombres en varios libros. Algo que diferenciar es que existen los que son graciosos y sarcásticos de una manera sana como Throne de las Crónicas Lunares de Marissa Meyer, y otros son los sarcásticos que fingen les vale un pepino todo y pueden llegar a ser violentos como Jace de TMI de Cassandra Clare, Zevro de Amanecer Rojo de Pierce Brown, Baz de Carry on de Rainbow Rowell o Daemon de Lux de Jennifer L. Armentrout.

Badass, esta característica me encanta más en mujeres que en hombres. Como por ejemplo Celaena de Trono de Cristal de Sarah J. Maas... en un inicio ella es como súper tranquila (por varias razones) pero entonces todo empieza a ser una locura y eso la lleva al borde y cuando está ahí PUM sale con todo su poder. Eso es algo que me encanta ver en un personaje cuando se está desarrollando. Otro ejemplo, Cinder de Las Crónicas Lunares de Marissa Meyer específicamente el desarrollo que tiene en el tercer libro.

Serios, no sé muy bien como describir esto usando una palabra, pero cuando el personaje es tan serio que de momentos llega a rayar en la indiferencia aunque como lectores sabemos que realmente le importan las cosas y probablemente le importan más que a nadie y por ello intenta pasar desapercibido. Jem de TID y Darcy de Orgullo y Prejuicio de Jane Austen.

Leal, específicamente ese personaje que llega a ser tan leal con alguien que puede sufrir y sufrir y solo sufrir y ahí sigue. El mayor ejemplo en el que puedo pensar es Newt de The Maze Runner de James Dashner.

Demasiado dramático, no puedo recordar a un personaje de libro por ahora. En el anime tenemos a Midoriya de Boku no Hero Academia que se la pasa llorando por cualquier cosa, gritando ante cualquier problema o pensando y analizando de más todo cuando realmente no es necesario pero llega a ser gracioso.